La semana pasada, del 20 al 23 de abril, los infantiles y juniors de nuestro equipo han estado en la zona de Panticosa. En los últimos años no hemos realizado este tipo de acciones por diferentes motivos, por lo que ha sido una experiencia nueva para todos.
Los principales objetivos de esta salida han sido reforzar las relaciones entre los compañeros y dar comienzo a los entrenamientos del tramo veraniego de la temporada y creemos que hemos acertado de pleno, ya que hemos visto a los chavales a gusto y aunque ha sido duro comenzar los entrenamientos después de la semana santa, creemos que ha sido más llevadero hacerlo juntos y en convivencia.
Salimos de Lasarte a las 9:30 del miércoles y recogiendo a los compañeros de Andoain, nos dirigimos al Pueyo de Jaca. Nos esperaba un mal tiempo, pero cuando llegamos sobre las 12:30, nos encontramos con claros, rayos de sol y una temperatura fresca pero agradable. ¡Qué suerte tuvimos! Tras comer y hacer un pequeño descanso, a las 16:00 subimos a Panticosa y los nadadores completaron el primer entrenamiento. Como hemos comentado, al ser un lugar nuevo para todos los nadadores, fue una experiencia preciosa nadar viendo las montañas nevadas de los pirineos. Al terminar, regresamos al albergue y después de cenar pudimos echar muchas carcajadas en los juegos de mesa.
Durante los dos días siguientes, por la mañana, los nadadores tuvieron sesiones de entrenamiento, y por la tarde, realizaron varias excursiones: el jueves se acercaron desde el albergue para ver la larga tirolina que hay en Hoz de Jaca y regresaron por el bosque, completando un recorrido de unos 11 km; y el viernes, debido al mal tiempo (hacía xiri-miri de vez en cuando), subieron a Panticosa por un sendero, donde conocieron la zona de la estación de esquí y volvieron a la piscina. Después de cenar el jueves, todos jugaron al juego de mesa Mihiluze, que también les dejó momentos inolvidables (con "eroglificos", versos, respondiendo preguntas sobre diferentes temas...) y el viernes, aprovechando la intriga que da la oscuridad de la noche, con linterna incluida, jugaron a 'Policías y ladrones', demostrando aptitudes para esconderse y correr uno tras otro.
El sábado por la mañana, el cansancio de los días anteriores era evidente y a los más jóvenes les costó levantarse de la cama, pero nuestros jóvenes se despertaron y descubrieron que las montañas cercanas estaban aún más nevadas, señal de que por la noche había hecho frío y nieve, y descubrieron paisajes increíbles. En el desayuno volvieron a coger fuerzas y nuestros jóvenes realizaron la última sesión de entrenamiento, en la que tuvieron la oportunidad de utilizar el baño turco y el jacuzzi como forma de recuperación.
Regresaron al albergue, comieron, hicieron las maletas y cogieron el autobus de vuelta a casa sobre las 16:00 horas. Después de 3 horas de viaje, cansados pero con una experiencia muy buena y bonita, nuestros nadadores regresaron a sus casas con ganas de iniciar la parte veraniega con fuerzas renovadas y terminar la temporada de la mejor manera posible!
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