Buena actuación en la jornada celebrada en Tolosa

El pasado domingo, a excepción de Nahia, el resto del equipo que está en marcha tuvo una cita en Tolosa, en la 2ª jornada del Campeonato de Control de la Federación Vasca de Natación.

Aunque la cita ya fue rara de inicio (no es muy habitual que una jornada de estas características se celebre el domingo por la tarde), hay que decir que los nuestros estuvieron acertados y consiguieron batir algunos récords. En total fueron 17 las marcas personales conseguidas por nuestras/os nadadoras/es y 3 los nuevos récords del de club que se consiguieron.

En esta jornada por parte de nuestro club, compitieron: Mikel Esnal, Unai G. Somovilla, Aintzane Sarobe, Eneko Elizasu, Nora Imaz, June López, Saioa Elola, Garazi Etxeberria, Izaro Audikana, Iker Gandía, Iker Gorostegui y Jon Pelayo.

Las marcas personales vinieron de la mano de:

• Nora Imaz en 200 cuatro estilos y en 50 mariposa; 2:36,34 y 35,08
• June López en 50, 100 y 200 libre (30,81, 1:09,05 y 2:23,90) y en 100 espalda (1:15,13).
• Izaro Audikana en 50, 100 y 400 libre (31,77, 1:06,31 y 5:03,25).
• Garazi Etxeberria en el 200 y el 400 libre (2:28,93 y 5:02,94) y el 100 mariposa (1:20,09).
• Iker Gandía en 100 libre (1:05,37) y 200 libre (2:30,00).
• Iker Gorostegui en 200 cuatro estilos (2:49,13)
• Jon Pelayo en 200 mariposa (3:15,63) y 100 braza (1:29,06).

En cuanto a los tres récords del club, dos de ellos fueron de 17 años femeninos y ambos vinieron de la mano de Aintzane Sarobe. Uno en el 200 libre, estableciendo la nueva marca en 2:13,75 y, la otra, en 200 cuatro estilos, dejando la nueva marca en 2:34,94. Arrebató los dos récords a Itsaso Tolosa, actual entrenadora. El tercer récord del club vino de la mano de Mikel Esnal en categoría Master 24-29, dejando el nuevo récord del club de 100 estilos en 1:04,34.

A pesar de que la estructura y organización de esta jornada y sobre todo de esta temporada no es la más deseable, estamos muy contentos con poder al menos ver a nuestros nadadores compitiendo y con mantener un mínimo de regularidad. En la medida en que las circunstancias lo permitan, las situaciones de entrenamiento irán mejorando y también las de competición, de ahí que, poco a poco, estemos seguros de ver a los nuestros al nivel habitual. De momento, si las cosas no se tuercen, más que en objetivos individuales concretos, ponemos nuestro objetivo en la Copa de Gipuzkoa de Clubes por equipos, para que, como equipo, podamos dar lo mejor que tengamos.