La semana pasada, entre el 11 y el 14 de abril, hemos tenido a jóvenes del equipo nacidos en 2009 y anteriores en Madrid en una estancia preciosa, en la que se juntaron un total de 14 nadadoras y nadadores. El año pasado la mayoría estuvieron en Panticosa, pero a pesar de la bonita experiencia, queríamos probar otra cosa y vimos que ir a Madrid era una buena oportunidad; así que ha sido una nueva aventura para todas y todos.
Los objetivos principales de esta salida han sido fortalecer las relaciones del grupo y dar inicio a los entrenamientos del la segunda parte de la temporada y creemos que hemos acertado de lleno, ya que les hemos visto a gusto y aunque será duro retomar los entrenamientos después de Semana Santa, tenemos la convicción de que va a ayudar el haber empezado con esta experiencia.
El martes, tuvimos que despertarnos muy temprano para coger el tren a las 5:02 en la estación de San Sebastián; pero eso también tiene sus ventajas, ya que estábamos allí a las 10:00 de la mañana y con muy buen tiempo. Llegamos al albergue y pasamos la mañana con diferentes juegos, después dejamos todo en las habitaciones, comimos y realizamos el primer entrenamiento. Una vez finalizada la sesión en el agua, de nuevo dejamos todas las cosas en el albergue, nos pusimos ropa cómoda y fuimos a un parque de al lado que estaba preparado para realizar actividad física de todo tipo, e hicimos diferentes ejercicios en seco y diferentes juegos. Después volvimos al albergue, cenamos y pusimos fin a la jornada, que fue bastante larga.
Al día siguiente, tuvimos sesiones de entrenamiento de mañana y tarde, en las que también hicimos trabajo de seco en los dos casos, esta vez en una terraza que había al lado de la piscina. Tras las sesiones de la tarde, nos dirigimos a otro parque cercano al albergue con intención de ver el atardecer y desde allí tuvimos la oportunidad de ver toda la ciudad. Jugando allí, como empezó a llover un poco, tuvimos que volver al albergue y con una buena cena nuestros jóvenes recuperaron fuerzas, deseando que llegara el día siguiente.
El jueves, era el día más esperado, ya que pasamos el día en el Parque Warner de Madrid. La mayoría, sin ningún tipo de miedo o duda, accedieron a todas las atracciones y se lo pasaron muy bien con la adrenalina y el buen ambiente que genera en el grupo. También hubo personas a las que les costó más tomar la decisión de subir, pero al final disfrutaron tanto como los demás; y otras, directamente, no se atrevieron por miedo o porque no les gusta la sensación que supone estar en este tipo de lugares. Pero, a pesar de todo, creemos que fue una experiencia muy bonita para todas y todos y, además, hemos visto que estas acciones ofrecen otra oportunidad diferente para conocernos más y fomentar la convivencia.
El último día, el viernes, teniendo la mañana libre, tras recoger las habitaciones y dejar las maletas preparadas, fuimos a visitar el conocido parque de El Retiro. Como para muchos era la primera vez, vimos edificios, el estanque y los monumentos que se encuentran dentro y después estuvimos jugando en un prado. Al mediodía regresamos al albergue para comer y para las 14:50 nos acercamos a la estación de tren para volver a San Sebastián. Después de cinco horas de viaje, regresamos a casa cansados pero con la sensación de haber aprovechado bien los cuatro días, con ganas de descansar, dar el pistoletazo de salida con fuerzas renovadas a la segunda parte de la temporada y terminarla de la mejor manera posible.
¡Esperamos que para todas y todos haya sido una experiencia agradable y bonita y que todos hayan disfrutado mucho!
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